La inflamación de las encías es simplemente el resultado de una acumulación de bacterias. La presencia de bacterias en nuestra boca es completamente normal, pero en algunas personas domina este tipo de bacteria que causa la enfermedad periodontal, es decir, enfermedad de las encías y los tejidos que sostienen los dientes. Cuando este tipo de bacterias aumenta por falta de una adecuada higiene dental, comienza la inflamación de las encías y la enfermedad periodontal.  La acumulación de bacterias bucales y residuos de alimentos forman las llamadas «placas bacterianas» que se depositan en dientes y encías. Es esencial eliminar la placa bacteriana mediante un cepillado regular y el uso de hilo dental. Si esta placa dental no se elimina todos los días, los componentes minerales de la saliva la endurecerán y formarán sarro, lo que dificultará su eliminación. Podremos identificar unas encías inflamadas ya que veremos que están agrandadas, y con un color rojizo (incluso a veces lila)

CONSECUENCIAS DE ENCÍA INFLAMADAS

Cuando una persona no tiene el hábito de cepillarse los dientes de manera regular y diaria, aumentará la acumulación de placa bacteriana y las encías se defenderán de esta placa mediante la inflamación de las encías. Las bacterias y toxinas adheridas a los dientes y las encías pueden causar inflamación e inflamación de las encías. Asimismo, puede producirse sangrado de encías durante el cepillado de los dientes o incluso de forma espontánea, así como una mayor sensibilidad de las encías al tacto. El primer efecto de la acumulación de placa es la inflamación de las encías aunque también puede ocurrir sangrado posterior. Con el tiempo, si esta placa no se elimina de la superficie del diente mediante el cepillado, se convertirá en una sustancia dura llamada sarro.

Al principio, el sarro se presenta en un color blanquecino. Si la persona bebe habitualmente vino tinto, café, té y otras bebidas que tiñen los dientes, se consume tabaco, el sarro es fácil de manchar y la materia blanca que nunca se ha notado, se vuelve amarillenta, negra o marrón. En presencia de sarro, las encías se inflamarán más. Y si el sarro no se elimina, el problema se extenderá al interior de las encías ya que el sarro comenzará a adherirse a la superficie de la raíz del diente.

Si esto sucede, el problema será aún mayor, porque la simple inflamación de las encías o gingivitis, también producirá inflamación en el hueso que sostiene los dientes, y se convertirá en una complicación que puede poner en peligro la estabilidad de las piezas dentales. Las encías inflamadas pueden causar enfermedades periodontales, como gingivitis y periodontitis.

 

En el siguiente post hablaremos de las diferentes enfermedades periodontales que se derivan de la acumulación de sarro. ¡ESTAD ATENTOS! 

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